Vamos hoy a tratar un tema típico que consultan muchísimo cuando van a inscribirse en una escuela de música por primera vez, cuando la mamá o el papá tienen los primeros acercamientos con el profesor de música de la institución, la típica pregunta que en algún momento sale es: "profe, ¿cuál es el mejor instrumento para aprender música?
Cada profesor por supuesto, va a tener una respuesta, muchos dirán la flauta, los que están en Venezuela dicen el cuatro, habrá quien por supuesto propone el hecho de que sea la voz, otros abogarán por el piano y así la lista irá creciendo según las opiniones diversas, es más, hay educadores en materia musical que sencillamente dicen que ningún instrumento, pues la idea es que empiece primero por la teoría, el solfeo y por todas estas prácticas preparatorias para que posteriormente pueda escoger el instrumento.
¿Que hacer ante tantas opiniones?
Yo quiero compartir una opinión más que puede ayudar a solucionar este tema tan polémico.
Es bueno plantearse primero, ¿con qué edades estamos trabajando? y tener muy en cuenta la opinión del que va a estudiar, por ejemplo, el niño que por primera vez se acerca a la música de la mano de mamá o de papá, le puede suceder lo que me sucedió a mí, que mi mamá un día me preguntó cuando tenía 5 años de edad si quería aprender a tocar órgano, y yo lo que dije esta bien, pero no sabía en qué me iba a meter, así de simple, o sea, no tenía ni idea de lo que era un órgano, cuando ya estuve enfrente al instrumento, me encantó, a final de cuentas al niño músico siempre le van a gustar todos los instrumentos, o sea, esa es otra condición importante que tenemos que tener hoy en cuenta dentro de lo que les quiero compartir, pues al niño músico le va a gustar explorar distintos timbres, entonces va a estar feliz en donde lo ubiquen porque necesita explorar ese nuevo instrumento. Por otra parte, es muy importante que pregunten a los niños, hay niños que a los 4 años de edad están claros en el instrumento que quieren, bien porque han visto el cuatro, han escuchado la guitarra o el piano, etc.
Pero aquí viene el otro detalle, algunos papás de pronto pueden decir, pero un piano hijo cuesta muchísimo, ¿por qué tú mejor no te vas por la flauta? y el pobre niño aburrido con la flauta, porque es lo que él quería era el piano.
Pregunten primero, ¿hijo, dónde has escuchado tú un piano? a lo mejor lo escuchó en la escuela, quizá en la casa de un primo o amigo, de pronto lo ha visto en videos y él se ha maravillado al escucharlo. Recuerdo también un caso, y perdonen que ponga muchos ejemplos personales, pero recuerdo el caso de mi hijo de un año de edad que cuando comenzaba la música de un programa de televisión, se quedaba petrificado con un año de edad, y se movía así como queriendo lanzarse al televisor y yo, pasaba prácticamente una hora repitiendo el intro del programa que lo tenía grabado, porque mi hijo, un bebé, encima de la camita se emocionaba con la canción una y otra vez.
Por tanto, el mejor instrumento para aprender la música es, aquel instrumento que le guste al estudiante, no el instrumento que recomienda el profesor, no el instrumento que recomiende papá o mamá, pues, si el estudiante se enamora de ese timbre, si les encanta con el simple hecho de tocar y escuchar los sonidos individuales que produce el instrumento, sea un fagot, un oboe, un clarinete, una armónica, un bajo, si solo eso ya les produce aquel gusto, aquel placer por la música, van por buen camino, porque esa persona sea niño, adolescente, adulto, va a disfrutar con el hecho de hacer ejercicios, escalas, acordes, arpegios, y lo va a hacer con todo el amor del mundo, porque definitivamente quiere disfrutar cada segundo, cada instante con su instrumento musical.
Los invitamos a escuchar nuestro Podcast Semanal y nuestro Programa de Radio aquí en nuestra web www.datemusica.com y en nuestro espacio en IVOOX
Cada profesor por supuesto, va a tener una respuesta, muchos dirán la flauta, los que están en Venezuela dicen el cuatro, habrá quien por supuesto propone el hecho de que sea la voz, otros abogarán por el piano y así la lista irá creciendo según las opiniones diversas, es más, hay educadores en materia musical que sencillamente dicen que ningún instrumento, pues la idea es que empiece primero por la teoría, el solfeo y por todas estas prácticas preparatorias para que posteriormente pueda escoger el instrumento.
¿Que hacer ante tantas opiniones?
Yo quiero compartir una opinión más que puede ayudar a solucionar este tema tan polémico.
Es bueno plantearse primero, ¿con qué edades estamos trabajando? y tener muy en cuenta la opinión del que va a estudiar, por ejemplo, el niño que por primera vez se acerca a la música de la mano de mamá o de papá, le puede suceder lo que me sucedió a mí, que mi mamá un día me preguntó cuando tenía 5 años de edad si quería aprender a tocar órgano, y yo lo que dije esta bien, pero no sabía en qué me iba a meter, así de simple, o sea, no tenía ni idea de lo que era un órgano, cuando ya estuve enfrente al instrumento, me encantó, a final de cuentas al niño músico siempre le van a gustar todos los instrumentos, o sea, esa es otra condición importante que tenemos que tener hoy en cuenta dentro de lo que les quiero compartir, pues al niño músico le va a gustar explorar distintos timbres, entonces va a estar feliz en donde lo ubiquen porque necesita explorar ese nuevo instrumento. Por otra parte, es muy importante que pregunten a los niños, hay niños que a los 4 años de edad están claros en el instrumento que quieren, bien porque han visto el cuatro, han escuchado la guitarra o el piano, etc.
Pero aquí viene el otro detalle, algunos papás de pronto pueden decir, pero un piano hijo cuesta muchísimo, ¿por qué tú mejor no te vas por la flauta? y el pobre niño aburrido con la flauta, porque es lo que él quería era el piano.
Pregunten primero, ¿hijo, dónde has escuchado tú un piano? a lo mejor lo escuchó en la escuela, quizá en la casa de un primo o amigo, de pronto lo ha visto en videos y él se ha maravillado al escucharlo. Recuerdo también un caso, y perdonen que ponga muchos ejemplos personales, pero recuerdo el caso de mi hijo de un año de edad que cuando comenzaba la música de un programa de televisión, se quedaba petrificado con un año de edad, y se movía así como queriendo lanzarse al televisor y yo, pasaba prácticamente una hora repitiendo el intro del programa que lo tenía grabado, porque mi hijo, un bebé, encima de la camita se emocionaba con la canción una y otra vez.
Por tanto, el mejor instrumento para aprender la música es, aquel instrumento que le guste al estudiante, no el instrumento que recomienda el profesor, no el instrumento que recomiende papá o mamá, pues, si el estudiante se enamora de ese timbre, si les encanta con el simple hecho de tocar y escuchar los sonidos individuales que produce el instrumento, sea un fagot, un oboe, un clarinete, una armónica, un bajo, si solo eso ya les produce aquel gusto, aquel placer por la música, van por buen camino, porque esa persona sea niño, adolescente, adulto, va a disfrutar con el hecho de hacer ejercicios, escalas, acordes, arpegios, y lo va a hacer con todo el amor del mundo, porque definitivamente quiere disfrutar cada segundo, cada instante con su instrumento musical.
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